capítulo 34, justo después del 32 [si salta usted el 132-61-33-67-83-142] (una declaración abierta)

para mi Hermosa, Laura.

Te quiero porque te llenas de
porque el amor no es una
celos sin ninguna razón,
fotografía
porque fantasmas etéreos rondan
es, más bien, como una
en tu memoria
película...
y porque nuestro paso
siempre evoluciona y se transforma.
nunca es el mismo.
Te prometo unas peleas ni las
te quiero porque tu voz
hijueputas
me llama a tus labios
y unas reconciliaciones
y a desearte desde mis
absurdas.
vísceras maltrechas y desparramadas.
y que algunas mañanas me
te amo por el olor de trementina fresca
despierte
que se mezcla con el sabor de tu
y no vibre tanto;
piel
y otras
y porque tu dolor me llama,
en que no me aguantes y te tengas que meter en tu cama
ese dolor que te dejo la traición de Oliveira
lleno de ira.
y la muerte de Rocamadour.